Piel inconforme

Un espacio para sentir, disentir, para disfrutar de aguas internas, o ríos, o mares... Para buscar las sombras de todos los árboles y aprender de su silencio... También para compartir el casual color de las cosas impreso en el papel húmedo o el lienzo... Y , ¿por qué no? para que hablemos sobre lo que pasa, o sobre lo que creemos que pasa...

"¡De la abundancia del corazón, habla la boca!"

miércoles, 12 de mayo de 2010

Tiempo Vacío, del poemario Memoria del Desencuentro, ECR, 1981



Ilustración:Acuarela de Mariamalia Sotela:
"Varablanca a la orilla del camino..."


Voy a sembrar una nueva cosecha.
Mientras tanto
recogeré los pocitos de niebla
que la mañana olvidó en la orilla
de la carretera.
También le robaré a la telaraña
una gota de agua de luz
para mi sed
y luego
arrancaré
poco a poco
mi piel que conociste
y te la devolveré.
Será reconocible
estará entera
con el oasis que tus dientes olvidaron
con las palabras incrustadas a fuerza de decirse
con todas las verdades y todas las mentiras azules.

Te la devolveré también con tu presente
si quieres
y con todo mi tiempo ya vacío.
Con una sonrisa de luz en equinoccio
solsticio
de verano
o de otoño
cayendo
lentamente,
si prefieres.

Mi piel en hoja
palma de mano de árbol
te la devuelvo
hoy
Esta noche en que el río
hizo un nudo con su cauce.

(Soltaré el lazo de agua de río
por la mañana.
Sé que se desbordará sobre el musgo y sabrá
elegir la tierra que lo ha de beber.)

1 comentario:

  1. Este poema nació subiendo las montañas de San Ramón de Tres Ríos, donde de verdad la mañana dejaba olvidados pocitos de niebla a la orilla del camino, y donde las gotas de agua en las telarañas eran gotas de luz para mi sed...
    Y a veces la vida hace un nudo con su cauce, como si fuera un río que no fluye, y hay que hacer nuevos trueques, negociar con la vida y hay que soltar...! (cuánto enmarcado en la memoria...")

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